Artículo de fecha 28-04-2015 de D. José Manuel Huidobro 


Caballero de la Orden de
Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén, Miembro de la Real
Asociación de Hidalgos de España. Máster en Derecho Nobiliario,
Heráldica y Genealogía (UNED). Autor de 55 libros y más de 700 artículos
.
Los
caballeros españoles de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de
Jerusalén, por privilegio papal, son “Canónigos Honorarios” de la
Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud y es por ello que tienen el
privilegio de llevar la cruz patriarcal colgada del pecho, así como
vestir el hábito de coro y el birrete, una prerrogativa que no se da en
otros países donde la Orden está presente, cuyos caballeros visten capa y
toco.
La
Iglesia Colegial del Santo Sepulcro de Calatayud, considerada madre en
España de la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalen, quiso
en su día mostrar su gratitud hacia los caballeros de dicho Orden,
animada por el deseo de conservar y aumentar entre ellos un estrecho y
secular vínculo fraternal, estableciendo que sus Caballeros ocupasen un
lugar en el Coro de los Canónigos de esa Real Iglesia Colegial,
revestidos con el hábito coral, durante las celebraciones sacras.
Hábito de coro, birrete y cruz patriarcal, elementos propios de los Caballeros Españoles
Hábito de coro, birrete y cruz patriarcal, elementos propios de los Caballeros Españoles
El
pasado sábado 25 de abril se celebró en Calatayud (Zaragoza) el
Capítulo Conjunto de las dos Lugartenencias (Occidental y Oriental) de
la Orden de Caballería del Santo Sepulcro de Jerusalén, con la
asistencia de numerosos Caballeros y Damas, así como también otros
actos, como la Liturgia de las Horas en el Coro, la Toma de posesión del estalo de los nuevos Canónigos Honorarios y una misa, seguidos de un fraternal almuerzo.
Acto de entrega de diplomas tras la toma de posesión
Acto de entrega de diplomas tras la toma de posesión
Diploma como Canónigo Honorario
Diploma como Canónigo Honorario
Según consta en la web de la propia OrdenLa Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud, casa madre de la Orden en España,
situada en Aragón, tiene su origen en la donación de terrenos para su
construcción por el Conde de Barcelona y Príncipe consorte de Aragón
Ramón Berenguer IV, en 1146.
Coro de la Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud
Coro de la Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud
El templo se consagró en 1156.
Así pués Ramón Berenguer IV, caballero del Santo Sepulcro, cede
distintas propiedades y encomiendas al canónigo de Jerusalén, fray
Giraldo, enviado por el patriarca de Jerusalén para tomar posesión de
las donaciones reales, siendo este el primer prior de Calatayud de 1141 a
1157. Desde ese año hasta 1851, la Colegiata regular del Santo Sepulcro
de Calatayud fue residencia de la comunidad de canónigos regulares del
Santo Sepulcro bajo la regla de San Agustín.
Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud
Colegiata del Santo Sepulcro de Calatayud
Tras la Bula de Anexión de Inocencio VIII de 28 de marzo de 1489,
por la que se decidió incorporarla con todos sus bienes a la de San
Juan de Rodas (Malta)  los Caballeros y Canónigos sepulcristras
aragoneses se dirigieron al Rey Fernando (El Católico) protestando la
decisión papal y solicitando su protección. La decidida acción del Rey
ante la Santa Sede logró que el Papa Alejandro VI revocara en 1494 lo
decretado por su antecesor en lo concerniente al Priorato de Calatayud.
De esta manera el Priorato continuó dependiendo directamente de la Santa Sede. Así
pues, gracias al apoyo de Fernando el Católico, la comunidad de
Calatayud continuó su existencia autónoma, pues el rey consiguió que no
le afectase la disolución de la Orden por el papa Inocencio VIII.
 Por las desamortizaciones en 1851 y
como consecuencia del concordato entre la corona de España y la Santa
Sede (Isabel II y Pío IX) la colegiata perdió el cabildo regular y
exento de jurisdicción episcopal. Acaba de esa forma de gobernar la Real
Colegiata desde su inicio, finalizando así mismo la dependencia directa
de Roma y del Patriarca de Jerusalén, que se estableció por Bula de
1262. A partir de ese momento se convierte en Parroquia, dependiente del
Obispado de Tarazona.
 A
finales del siglo XIX, los Caballeros del Capítulo de España de la
Orden Militar y Pontificia del Santo Sepulcro solicitaron del Papa León
XIII la reinstauración del Templo del Santo Sepulcro de Calatayud como
colegiata. El 18 de septiembre de 1901, por breve pontificio, se concede
el título de colegiata ad honorem con un cabildo de canónigos seculares presididos por un párroco-prior.
 En
recuerdo de los lazos históricos que siempre unieron a los brazos
religioso y militar de la Orden y para perpetuar la memoria de los
Augustos Patriarcas Latinos de Jerusalén, Grandes Maestres de la Orden,
los M.I. y Rudos. Canónigos de la Real e Insigne Colegiata del Santo
Sepulcro de Jerusalén en Calatayud, dispensan a todos los
Caballeros pertenecientes a los Capítulos de la lengua de España el
título de “canónigos honorarios” de la citada Real Colegiata, así como
el uso de la cruz patriarcal insignia del brazo religioso en forma de
venera.
Cruz Patriarcal, de doble travesaño flordelisada
Cruz Patriarcal, de doble travesaño flordelisada
Los
caballeros asisten al coro cuando se les convoca, revestidos con su
hábito coral y tomando asiento entre los canónigos. Esto es una
peculiaridad de los caballeros del Santo Sepulcro en España que no se da
en el resto del mundo. 
 El
hábito de coro consiste en un amplio manto de estameña blanca, hasta
los pies, cerrado adelante por unos broches de pasamanería (alamares),
con cola (que se lleva normalmente recogida al brazo izquierdo), con
sobrecuello de gola rizada. De cuello cuelga un grueso cordón de seda
blanco con borlas y nudo corredizo. Al pecho, en el lado izquierdo, la
cruz quíntuple, llamada de Jerusalén o de Godofredo de Bouillón; y
birrete negro con la cruz quíntuple al frente y una pluma rizada plana. A
modo de pectoral se lleva la cruz patriarcal de los canónigos del Santo
Sepulcro, indicando la hermandad de la que hablamos.