domingo, 15 de enero de 2017

Historia del antiguo Israel - Wikipedia, la enciclopedia libre

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Historia del antiguo Israel




El Levante en el siglo XIV a E.C., con las fronteras del antiguo Egipto (época de la correspondencia de Amarna).

Antiguas rutas levantinas, c. 1300 a E.C.

Israel desde el espacio.
La historia del antiguo Israel abarca desde el siglo XX a. C. hasta la expulsión y Diáspora en el primer siglo de nuestra era, en un área comprendida entre el Mediterráneo, el desierto del Sinaí, las montañas del Líbano y el desierto. Se concentra especialmente en el estudio del hebreos o israelitas durante este período, y de forma secundaria de los otros pueblos que con él convivieron, como filisteos, fenicios, moabitas, hititas, madianitas, amorreos y amonitas. Las fuentes sobre este período son principalmente los escritos bíblicos la Biblia hebrea o Tanaj, conocida por los cristianos como Antiguo Testamento, el Talmud, el libro etíope Kebra Nagast y escritos de Nicolás de Damasco, Artapano de Alejandría, Filón de Alejandría y Flavio Josefo. Asimismo, otra fuente principal de información son los descubrimientos arqueológicos en Egipto, Moab, Asiria o Babilonia, así como los vestigios e inscripciones en el propio territorio de estudio de las regiones.



Índice

Introducción

La historia de la región ocupada más adelante por los reinos de Israel y Judá ofrece problemas particulares para el historiador moderno. Debido a la asociación de esta área con lo relatado en la Biblia, hay una tendencia a ver la historia del Levante mediterráneo
desde una perspectiva casi puramente bíblica, prestando escasa atención
al período posbíblico. Los estudios arqueológicos han tendido a verse a
través del relato bíblico,1 haciendo difícil de entender la historia de esta importante zona dentro del contexto arqueológico de la totalidad del Oriente Medio.


Algunos escritores consideran que las diversas fuentes están en
conflicto, lo que convierte el estudio en un tema polémico, con
implicaciones en los campos de la religión, la política y la diplomacia.


Por ello es difícil dar una visión que sea apoyada por la totalidad
de los historiadores. Las fechas exactas y las precisiones que pudieran
dar están en continuo debate, no hay acontecimientos bíblicos cuyo año
exacto se pueda validar por fuentes externas antes del siglo IX a. C., (coronación de Omri, rey de Israel):
todas las fechas anteriores son extrapolaciones. Además, la Biblia no
se presta muy fácilmente a estos cálculos, no indica más referencias que
la vida de los distintos personajes, y la línea histórica debe ser
reconstruida agregando datos, un proceso que introduce errores por redondeo. Las fechas más antiguas utilizan la Biblia como única fuente, una visión llamada maximalista.


Los minimalistas discuten que algunos acontecimientos sucedieran, y afirman que las fechas son dudosas: si la misma existencia del Reino unido está en duda, es insustancial afirmar que se desintegró en 922 a. C. Philip Davies2
por ejemplo, explica cómo el Canon bíblico puede haberse realizado
solamente para gente con una larga tradición en lectura y escritura, que
se encuentran solamente en la última época persa o primera helenística,
y afirma que los relatos de períodos anteriores son en gran parte
reconstrucciones basadas en tradiciones orales. Los minimalistas no
discuten que algunos de los acontecimientos posteriores al siglo
IX a. C. tengan corroboración, como la estela de Mesha;
la discrepancia surge en el período anterior, donde el relato bíblico
parece estar en desacuerdo con lo descubierto por la arqueología
moderna.


Otro problema es el causado por diferencias sobre terminología de los
periodos históricos. Por ejemplo, el período en el final de la edad antigua del bronce el principio de la media, es llamado EB-MB por Kathleen Kenyon,3 MB I por Guillermo Foxwell Albright, cananita medio I por Yohanan Aharoni,4 y bronce temprano IV por Guillermo Dever y Eliezer Oren.


Civilizaciones en Israel

El Génesis remonta el principio de Israel a tres patriarcas, Abraham, Isaac y Jacob, el último también conocido como Israel y del cual derivó posteriormente el nombre de la tierra. Jacob, llamado un "arameo vagabundo" (Deuteronomio 26:5), regresó a Harán, el hogar de sus antepasados, para obtener esposa. Durante su regreso desde Harán a Canaán cruzó el Jaboc, un afluente oriental del río Jordán (Génesis
32:22-33). Enviando a su familia y criados lejos, esa noche luchó, en
un lugar que se llamó en adelante Peniel, con un ángel que por la mañana
le pidió su nombre. Desde entonces lo retitularon "Israel", 'el que
pelea con Dios'. Fue padre de 12 hijos, de sus esposas Lea y Raquel (hijas de Labán), y de sus sirvientas Bilha y Zilpa. Los doce fueron llamados los Hijos de Israel. Esta historia sobre los orígenes de Israel lo localiza en la zona oriental de Jordania. Los siguientes relatos se trasladaron al oeste con la historia del saqueo de Siquem (Génesis 34:1-33), después de lo cual el área de la colina de Canaán se considera como la base desde la que creció Israel.


Guillermo F. Albright, Nelson Glueck y E. A. Speiser han situado este relato en el bronce medio basándose en tres puntos: nombres personales, modo de la vida, y costumbres.5
Otros eruditos, sin embargo, han sugerido fechas más tardías para la
edad patriarcal pues estas características fueron duraderas en la vida
del Cercano Oriente. Cyrus Gordon,6 basando su discusión en la llegada de pastores nómadas monoteistas durante el final de la época de Amarna,
sugirió que es más correcto situarlo en la última edad de bronce. Juan
Van Seters, basándose en el uso generalizado de camellos, en los reyes
filisteos de Gerar, en la existencia de una economía monetaria y en la
compra de tierra, asegura que la historia pertenece a la edad de hierro.
Otros eruditos (particularmente, Martin Noth) encuentran difícil el
determinar cualquier período para los patriarcas, y sugieren que la
importancia de los textos bíblicos no es necesariamente su historicidad,
sino el indicar cómo funcionaba la sociedad israelita durante la edad
de los metales.


Más recientemente, análisis por activación de neutrones realizados por Jan Gunneweg de la Universidad Hebrea de Jerusalén,7
estudiando asentamientos asociados con el principio de la edad de
hierro, demuestran evidencia de un movimiento de colonos en el área
desde el noreste, lo que está acorde con esta historia.7 8


Prehistoria

Excavaciones al sur del lago de Tiberiades y en otras partes del valle del Jordán han permitido sacar a la luz rastros de homínidos que se remontaban al paleolítico inferior, o sea datadas hace más de un millón de años. Otros fósiles descubiertos tienen una edad aproximada de 300 000 años, y el uso de cuevas por el hombre parece comenzar en el Achelense superior superior. El fósil del hombre de Galilea tiene una antigüedad de cerca de 140 000 años.


  • Entre el undécimo milenio a. C. y el noveno se desarrolla en Canaán la civilización Natufiense, seguramente nómada,
    de la que se encuentran algunos vestigios. Esta civilización estaría
    compuesta por dos grupos de poblaciones ligeramente diferentes, por una
    parte los antepasados de pueblos del tipo eurafricano (los que serían
    Canaán, Mesopotamia, Irán y Anatolia en tiempos históricos) y los ancestros de pueblos proto-mediterráneos, también numerosos en Canaán.
  • A partir del IX milenio a. C. las tribus neolíticas domesticaron plantas, animales, se sedentarizaron y practicaron la agricultura y la ganadería. Entre los años 10 000 y 8000 a. C., las herramientas de hueso adquieren importancia y los útiles de piedra
    un desarrollo característico. Durante este período las condiciones
    climáticas son favorables a los asentamientos humanos, con más
    precipitaciones y temperaturas suaves.
  • A partir del séptimo milenio a. C. la ciudad de Er Riha (Jericó)
    se alza como una de las más antiguas del mundo, es la época en que se
    constituyen las primeras ciudades. Durante el último cuarto de este
    milenio aparece la cerámica, así como otras formas de artesanía.
  • Canaán del VI y de la primera mitad del V milenio a. C.
    se conoce mal, se suponen desplazamientos de población que pueden ser
    debidos a variaciones climáticas. Tanto las montañas como la región
    costera están ocupadas por una civilización de carácter forestal, como
    da prueba el predominio de instrumentos destinados al trabajo de la madera.
    • A mediados del quinto milenio a. C. los antiguos asentamientos del valle del Jordán, como Jericó, fueron ocupados de nuevo debido a la mejora de las condiciones climáticas.
    • Al final del V milenio Canaán alcanzó un nivel de desarrollo
      económico y cultural que le acercaba al de las civilizaciones del norte
      de Siria que se habían beneficiado antes de influencias mesopotámicas.
  • IV milenio a. C.:
    La civilización cananea se organizó con un sistema de ciudades-Estado,
    fruto de la fusión entre agricultores sedentarios y pastores
    seminómadas.
    • En la primera parte del milenio llegaron desde el norte las técnicas metalúrgicas
      y el trabajo del marfil. Aparecieron estructuras técnicas y económicas
      adaptadas a las regiones secas: allí se instalaron pequeñas
      colectividades que vivían del cultivo de cereales y de la cría de ganado mayor y menor.
    • En la segunda mitad del IV milenio comienza la influencia egipcia sobre la región.
    • Hacia el final, la civilización de los agricultores y ganaderos
      desaparece sin que sea posible establecer vínculos con la formación de
      la civilización cananea del III milenio a. C. Hasta 2400 a. C. el clima
      fue un poco más húmedo que hoy día.
El comienzo de intercambios entre Canaán y Egipto gracias al Camino de los Reyes que cruzaba el desierto de Sinaí, hacia el final del IV milenio adC., es un acontecimiento de primera importancia ya que hasta entonces Canaán había sido un "callejón sin salida" sujeto solamente a influencias asiáticas. Estas relaciones tomaron una amplitud considerable, gracias a la utilización de bueyes como animales de tiro, capaces de cruzar los aproximadamente 200 kilómetros de casi desierto que separan el sur Cananeo del delta del Nilo. Por lo tanto, el Levante comienza a desempeñar el papel de zona de paso, donde se cruzaban las influencias, y a menudo las armas, de los grandes imperios de Egipto y el Oriente Próximo asiático.
  • El III milenio a. C. es el de la civilización cananea que se extiende hasta tiempos históricos. Aunque la escritura no aparezca en la región antes de la segunda mitad del segundo milenio,
    habida cuenta del estado de superproducción, centralización y
    redistribución de los excedentes alimentarios, los historiadores
    consideran que este nuevo orden económico, social y político señala la
    entrada en la historia en el transcurso del III milenio. Debido a los
    intercambios con Egipto, la región se desarrolla y se enriquece,
    especializándose en el comercio de cerámica, mientras numerosas ciudades
    se desarrollan y consolidan.

Periodo cananeo: del III milenio al siglo XVI a. C.

Los historiadores consideran generalmente que el período cananeo se
extiende desde el principio del III milenio a. C. hasta el final del siglo XVI a. C.


Al final del III las poblaciones seminómadas cruzaron el Jordán y
penetraron en Canaán, causando el hundimiento de las estructuras
socioeconómicas existentes: se destruyeron y abandonaron las ciudades, y
la economía volvió a la ganadería. A partir del siglo XIX a. C.
comenzó un aumento de los asentamientos permanentes y una disminución
del número de tribus, pero permaneciendo aún muy cerca de la
organización tribal. Este período durante el cual los desplazamientos
entre Asia, desde Mesopotamia, y Egipto eran intensos, corresponde a un
momento de agitación interno que sirvió de preludio a la invasión de
Egipto por los hicsos (Príncipes de los países extranjeros). Durante este mismo período, las ciudades cananeas comenzaron a rodearse con murallas. La existencia de la ciudad cananea de Ourousalim (Jerusalén) se certifica en escritos que datan del siglo XXI a. C.


Los ataques e infiltraciones repetidos abrieron a los hicsos el camino hacia la parte oriental del delta del Nilo, donde se instalaron e hicieron de Avaris su capital en el siglo XVI a. C.
En esta época, Canaán, parte de un imperio colocado bajo la autoridad
de Avaris, alcanzó un nivel de civilización notable: potentes
fortificaciones rodeaban las residencias de los reyezuelos cananeos, en
guerra permanente unos contra otros y que recurrían a los carros de
guerra arrastrados por caballos. Las desigualdades sociales se muestran
claramente: Se construían espaciosas residencias que contrastaban con
los cuchitriles que sus contemporáneos ocupaban. Las tumbas, cavadas en
la roca, eran sepulturas generalmente familiares; armas y joyas de buena
calidad acompañaban los restos de los difuntos afortunados. En el
ámbito de la cerámica, las formas imitan al metal. Se ve extenderse por
la región una alfarería
hicsa: negra, pulida e incrustada de pasta de caliza blanca, así como
trabajos sobre marfil de gran calidad; también son reputados los
cananeos del norte (proto-fenicios) por el tinte en púrpura.


  • Hacia 1850 a. C. la ciudad de Ascalón se convirtió en capital de un reino y en puerto muy activo sobre el Mar Mediterráneo,
    desde donde se exportaban los productos del interior. Rodeada de una
    muralla de 2 km de circunferencia, la ciudad debía contar con cerca de
    15 000 habitantes.
  • En esta época comienza la migración de las tribus de Israel hacia Canaán, posiblemente desde el sur de la región caucásica. No existe documentación histórica verificable. Según el Antiguo Testamento, es el periodo correspondiente a Abraham, Isaac y Jacob, que abarcaría hasta 1650 a. C. aproximadamente.
  • Completando la liberación nacional emprendida por los faraones de la décimo séptima dinastía, Amosis I se apoderó de Avaris y expulsó a los hicsos hasta Asia. Así pues, hacia mediados del siglo XVI a. C.
    Egipto conquistó Canaán donde el protectorado egipcio se mantuvo
    durante tres siglos y medio, durante los cuales la situación
    internacional sufre numerosas modificaciones: los conflictos con los hititas y las frecuentes rebeliones de los beduinos acampados en el Negev y Sinaí implicaron destrucciones, saqueos, y deportaciones.

Dominio egipcio

En el Éxodo se relata cómo algunos de los descendientes de Israel se
convirtieron en esclavos egipcios. Se han dado varias explicaciones para
relatar las circunstancias bajo las cuales esto ocurrió, algunos
historiadores creen que pudo haberse debido al cambio de las condiciones
políticas en Egipto: en 1650 a. C. el norte de Egipto fue conquistado
por tribus de un pueblo llamado Hicso por los egipcios, al parecer una mezcla de semitas y de hurritas. Los hicsos fueron expulsados por Amosis I (1550 - 1525 a. C.), el primer faraón de la décimo octava dinastía con la que comienza el Imperio Nuevo. Amosis destruyó la capital de los hicsos en Avaris y sus sucesores conquistaron la ciudad de Saruhen (cerca de Gaza),9 y destruyeron confederaciones canaanitas en Megido, Hazor y Qadesh. Tutmosis III
(1504 a. C. al 1450 a. C.) estableció el imperio de Egipto sobre el
occidente del Cercano Oriente, derrotando a la confederación cananea en
Megido y tomando la ciudad de Joppa, trasladando la frontera desde el Sinaí a la curva de Éufrates, logrando la máxima extensión territorial en la zona. (No son pocos los eruditos que lo mencionan como el emperador del Éxodo)


El dominio egipcio se mantuvo en la región de Canaán (zona en la cuál debían emerger Israel y Judá) hasta el reinado de Ramsés VI, quien reinó cerca 1150 a. C.

Cronología aproximada:10


  • 1440 a. C.: reinado de Amenhotep II (circa 1450-1424 a.C.), durante el cual se encuentra en los textos egipcios la primera mención del pueblo Habiru (posiblemente hebreos).11 La evidencia recientemente descubierta parece indicar que muchos habirus hablaban hurrita;12 posiblemente era una casta social más que un grupo étnico, e incluso pueden haber estado incorporados en los grupos tribales de los primeros israelitas.13 14 15
  • Circa 1400 a. C.: primera mención a los shasu en expedientes egipcios encontrados en el sur del Mar Muerto. Shasu es un nombre que contiene un grupo yavista, aunque la inscripción egipcia de Amenhotep III,
    en el templo de Soleb, "Yhw en la tierra del Shasu", no utiliza el
    determinativo para un dios ni para la gente, sino para el nombre de un
    lugar.
  • 1350-1330 a. C.: la correspondencia de Amarna da cuenta detallada de las cartas intercambiadas durante el período de dominación egipcia en Canaán durante el reinado de Akenatón.
    Los alcaldes locales, tales como Abdi Khepa de Jerusalén y Labaya de
    Siquem, eran delegados del faraón, y actuaban en su favor. Akenaton les
    informa de haber enviado a la región a un regimiento de Medjay (Nubia)
    para mantener orden. En este período comienza la expansión hitita en el
    norte de Siria, y se conoce la propagación de una epidemia en la
    región.
  • 1300 a. C.: algunos comentaristas de la Biblia calculan el nacimiento de Moisés alrededor de esta fecha. Pero otros lo colocan antes del 1500 a.C.

Imperio hitita entre 1560 y 1300 a. C.
  • 1292 a. C.: comienza la Dinastía XIX con el reinado de Ramsés I. Ramsés II (1279-1213) firmó un tratado
    con los hititas después de cederles el norte del Levante. Condujo una
    campaña a través del territorio que más tarde sería Israel, después de
    la rebelión de los shasu que siguió a la batalla de Qadesh, estableciendo una guarnición egipcia en Moab.
  • Circa 1200 a. C.: el imperio hitita de Anatolia fue conquistado por tribus llegadas del oeste. Los cananeos de la costa norte, (llamados posteriormente "fenicios" por los griegos)
    pudieron haber sido desplazados temporalmente, pero regresaron tras la
    marcha de los invasores que no se asentaron en el lugar.16
  • 1187 a. C.: Invasión de Egipto por los Pueblos del Mar. Entre ellos estaba un grupo llamado P-r-s-t (primero registrado por los egipcios como P-r/l-s-t) identificado generalmente con los filisteos. Aparecen en una inscripción del templo construido por Ramsés III en Medinet Habu, donde describe su victoria contra los pueblos del mar. Los estudiosos de la biblia del siglo XIX identificaron la tierra de los filisteos (Filistea o Plesheth, con el significado hebreo de "invasores")17 con Palastu y Pilista de las inscripciones asirias, según el diccionario de la Biblia
    de Easton (1897). Otros grupos además de los filisteos eran los
    tjekker, dananeos y shardana. El contraataque de Ramsés III destruyó la
    mayoría de los sitios cananeos. El mismo faraón permitió más adelante a
    los filisteos y tjekker, y posiblemente también a los dananeos,
    reconstruir las ciudades del camino costero, llamadas en el Éxodo el Camino de los Filisteos, nombre que se utiliza para denotar la región costera habitada por este pueblo. Las cinco ciudades filisteas principales eran Gaza, Ashdod, Ekron, Gath, y Ascalón. La arqueología moderna sugiere intercambios culturales con Micenas.
    Aunque los filisteos adoptaron la cultura y la lengua local cananea
    antes de dejar cualquier texto escrito, se achaca un origen indoeuropeo
    para las pocas palabras filisteas conocidas.
  • 1150 a. C.: problemas internos de Egipto conducen a la retirada de las guarniciones egipcias asentadas en Bet She'an, en el valle del Jordán, Megido y Gaza, durante el reinado de Ramsés VI.

Posibles rutas del Éxodo, según el relato bíblico.
El período entre el final de la décimo octava y principios de la vigésima dinastía fue particularmente confuso. La Biblia especifica que los israelitas salieron de Egipto 480 años antes de que el rey Salomón
construyera el Templo (1ª Re 6:1). Esta construcción data
aproximadamente del año 970 a.C. por lo que la fecha aproximada para el
Éxodo resulta ser 1450 a.C., sugiriendo que Tutmosis III pudo haber sido
el faraón relacionado con el Éxodo.


El Éxodo de Egipto de los israelitas y su cronología están en
permanente debate. Sin embargo, dado que la Biblia indica que los
hebreos partieron de la ciudad llamada Ramesés y a hacia Sucot,18 ciudades que son datadas en el siglo XIII a.E.C., durante el período en que Ramsés II gobernaba Egipto, en el campo de la investigación se considera el año 1250 a.E.C.19 H.W.F. Saggs observa en sus escritos académicos que:


La mención de la ciudad de Ramesés en Éxodo 1:11
en tanto que localidad de almacenaje, construida en parte por los
esclavos israelitas, ofrece de hecho un indicio cronológico, dado que
[hoy] es sabido que Ramsés II construyó una ciudad, Per-Ramsés [i.e., Pi-Ramsés],
la cual se corresponde con el nombre proporcionado por la Biblia. Ello
tiende a posicionar la esclavitud [de los hebreos] en Egipto y su salida
de ese país en el siglo XIII a.E.C.20


Evidencia extra-bíblica de la presencia israelita en Canaán se encuentra seis años después de la muerte de Ramsés II, en la Estela de Merenptah, en una inscripción realizada por ese faraón sobre su campaña militar en tierras de Canaán hacia 1210-1208 a. C.


Dificultades con la cronología bíblica

El total de los reinados de los reyes de Judá entre el cuarto año del reinado de Salomón, cuando se supone que construyó el Templo, y la destrucción de Jerusalén en 586 a. C., da 430 años.


Dado que Salomón reinó aproximadamente desde el año 970 a.C, la
edificación del Templo queda fijada alrededor de esa fecha. Esto
sugeriría que la edificación del Templo ocurrió cerca del año 967 o
966 a. C.


Según la Biblia (Reyes 6:1), entre esa construcción y el éxodo habían
trancurrido un total de 480 años, lo que da la fecha de 1447 a. C.
aproximadamente para el éxodo, acercándolo sugestivamente al final del
reinado de Tutmosis III.15
Según Éxodo 12:40, el destierro en Egipto había durado 430 años, con el
resultado que la llegada de los israelistas al Nilo debería haber
ocurrido en el reinado de Sesostris I, que comenzó hacia 1920 a. C. Agregando las largas vidas de Abraham, Isaac y Jacob, habría que fechar la llegada de Abraham a Canaán en el 2141 a. C., y la llegada a Egipto en 2116 a. C., durante la décima dinastía cuya capital estaba en Heracleópolis Magna. La "servidumbre" en Egipto habría ocupado el período entre las dinastías XII a la XVIII.


Como en Números 32:13 se asignan 40 años a vagar por el Sinaí, las conquistas de Josué deben haber ocurrido durante el reinado de Amenofis II, cuando todo Canaán estaba en poder de Egipto pero los egipcios “habían conocido el poder del Dios hebreo Yahvé” [“Luego que me cubra de gloria a expensas del faraón y sus guerreros, los egipcios sabrán que soy el Señor” (Éx 14:18)] (por lo que desde el desastre del ejército egipcio ya no los habrían vuelto a perseguir, porque las proezas del Dios de Israel se difundieron profusamente, incluso entre los filisteos (1ª Sam 4:8; 6:6).


Luego de la caída de Jericó [que ocurrió, tal como lo revelaron los
trabajos del arqueólogo británico John Garstang, cerca del 1410 a.C.],
el período de los Jueces se extendería hasta cerca del 1010 a. C., siendo luego reemplazados por el período monárquico del rey Saúl.
Desafortunadamente las fuentes egipcias no dicen nada sobre Israel,
Josué o sus sucesores, y la Biblia no dice nada sobre los Amenofis,
Tutmosis o Ramsés de este periodo.21 .-.


La conquista de Canaán


Ephraim Moses Lilien, Josué, 1908

Mapa con las doce tribus israelitas, 1200-1050 a.E.C.
Claramente, el proceso de la infiltración israelita en Canaán es más
complicado que lo narrado en la Biblia. El patrón del establecimiento y
la génesis de Israel como pueblo fue un proceso complejo que implicaba
principalmente a grupos nativos de pastores de Canaán (quizás incluyendo
habiru y shasu), con una cierta infiltración de grupos exteriores,
tales como hititas y arameos
del norte así como grupos meridionales de shasus tales como los
keinitas, alguno de los cuales puede haber venido de otras zonas
controladas por Egipto. Cuando Israel conquistaba Canaán, Egipto estaba
nominalmente en control de la región. 22


Genéticamente, los judíos demuestran tener conexiones con el pueblo kurdo y otros grupos del norte de Irak,
sugiriendo ésta como el área de la cual la mayoría de sus antepasados
vinieron originalmente, un hecho confirmado arqueológicamente a partir
del período Khirbet Kerak, período medio de la Edad del Bronce, con la expansión de los hurritas (horreos en el Tanaj), y con la de los shasu (= egipcio) y de ahlamu (= en acadio asirio, arameos) al principio de la Edad del Hierro.23 24 25


Según la Biblia, tras salir de Egipto, los israelitas vagaron por el
desierto durante una generación, para invadir luego la tierra de Canaán
destruyendo ciudades cananeas, como Ai, Jericó y Hazor bajo las órdenes
de Josué.
Sin embargo, este hecho también se lo adjudica Ramses II que asegura
haber conquistado Canaán y destruido Jericó y otras ciudades circa
1200 a. C.,26
a pesar del hecho de que Ai y Jericó parecen haber estado deshabitadas
en este tiempo, desde que habían sido destruidas cerca del 1400 a. C.
Muchos otros de los sitios mencionados en el Libro de Josué
también parecen haber estado abandonados en el 1200 (fecha sugerida por
Mattfield como la más probable para el Éxodo), pero estaban ocupados en
el siglo VII a. C..
Otros grupos podían haber desempeñado un papel protagonista en la
destrucción de centros urbanos durante la última edad de bronce, como
los pueblos del mar, entre los cuales estaban los filisteos y los mismos
egipcios, que invadieron la zona muchas veces. Las guerras entre las ciudades-estados vecinas han desempeñado probablemente un papel importante.


Periodo de los Jueces

Si los israelitas regresaron a Canaán hacia el 1400 a. C., ésta era
una época en que los grandes poderes de la región estaban concentrados
entre Egipto y los ascendientes Hititas. Posteriormente, hacia el año
1200 a.C. fue la época de los "pueblos del mar", en la que filisteos,
tjekkers y posiblemente dananeos se instalaron a lo largo de la costa
desde Gaza
en el sur a Joppa en el norte. El Oriente Medio parecía vivir en una
edad oscura, de la que tardó siglos en salir. La recuperación parece que
comenzó en las ciudades comerciantes del área filistea, siguiendo hacia
el norte, a las fenicias
antes de avanzar hacia las zonas interiores, las colinas de Judea y
Samaria (que recibirían los beneficios del comercio recién a finales del
Siglo X a.C.).


En sus ataques iniciales bajo Josué los hebreos ocuparon la mayoría
de Canaán, que repartieron según las líneas familiares tradicionales
derivadas de los hijos de Jacob y de José (las tribus de Israel). No había ningún gobierno formal, y el pueblo era guiado por los jueces.


Los Jueces eran los líderes carismáticos de su tiempo,
personas inspiradas por el Espíritu Santo (Jue 3:10; 6:34; 11:29; 13:25;
14:6,19; 15:14,19). Eran los pastores del pueblo que generalmente
pertenecían a las familias más importantes de sus tribus .(2ª Sam 7:7)


En este tiempo, el nombre "Israel" se mencionó por primera vez en una fuente arqueológica contemporánea, la estela de Merenptah.


Orígenes de la monarquía

Hacia el Siglo XI a.C, los hijos de los sacerdotes-Jueces tomaban “lo mejor de las ofrendas para sí mismos”. Se daban a la avaricia, el soborno y pervirtieron el derecho (1ª Sam 2:14; 8:3). Asimismo Trataban con desprecio la ofrenda del Señor
(1ª Sam 2:17). La cohesión israelí y la protección que Dios brindaba a
esa nación dependía de "seguir el camino del Señor", por lo cual iban
camino a la disolución.


Al mismo tiempo la prosperidad volvió a la región al final de la edad
de bronce, se recuperó el comercio con Egipto y Mesopotamia, y se
abrieron nuevas rutas comerciales, desde Cadesh-Barnea al sur, de Hebrón, Jerusalén y Lakís en Samaria, a Siloé, Siquem y a través de Galilea, a Megido y todo el valle de Jezreel.
Esta ruta amenazaba el monopolio comercial de los filisteos, que
intentaron dominarla tanto directamente, con una intervención militar
contra las tribus de Israel, como indirectamente, promoviendo a
mercenarios a posiciones de poder como los Achish de Gath, posteriores aliados de David.


Según lo permitido en el capítulo 7 del Deuteronomio, Israel decidió elegir un rey para luchar con eficacia (I Samuel
8:6, 20) contra la amenaza de sus vecinos. Según los libros de Samuel,
el último de los jueces, la nación pidió un rey porque los hijos de Elí
(El sumo sacerdote de la época), que habían sido designados como jueces,
emplearon mal su cargo. Aunque él intentó disuadirlos, los israelitas
estaban resueltos, por lo que Saúl ben Qish, de la tribu de Benjamín,
fue ungido como rey por Samuel. Desafortunadamente no se ha encontrado
ninguna evidencia independiente sobre la existencia de Saúl, aunque el
primer período de la Edad del Hierro era una fase de expansionismo filisteo, lo que está de acuerdo con el relato bíblico.


Reino unido de Israel


Reino de Israel (monarquía unida) en tiempos de Saúl y David, 1020–966 a.E.C. El territorio continuó unido hasta la muerte de Salomón en 928 a.E.C.27
El Reino de Israel
(en hebreo: מַלְכוּת יִשְׂרָאֵל, Maljut Yisraeil) abarcaba en la época
de máxima expansión una extensión muy superior a la del actual estado de
Israel, ya que se extendía del sur del Líbano a la península del Sinaí y del mar Mediterráneo al río Jordán, según las descripciones de Samuel.


Las controversias aparecen constantemente: Según Finkelstein y Silberman,
en la época de los reinados de David y Salomón Jerusalén parece estar
despoblada o con solo unos cientos de habitantes: insuficientes para
gobernar un imperio que abarcase desde el Éufrates a Eilath.
Aseguran que la primera referencia independiente para el Reino de
Israel es de 890 a. C., mientras que para el de Judá es aproximadamente
750 a. C. Sugieren que, debido a los prejuicios religiosos, los
historiadores posteriores (es decir, los autores bíblicos) suprimieron
los logros de la dinastía de Omrí (que la Biblia describe como politeístas) achacándolos a una supuesta edad de oro de los gobernantes monoteístas.28


1020 a. C.: Israel durante el reinado de Saúl

El reinado de Saúl fue corto, gobernó relativamente pocos años y fue
acusado de corrupto, aunque algunos manuscritos antiguos dan la cifra de
40 años (cf. Nuevo Testamento,
que le da un reinado de cuarenta años); aunque basándose en el número
de las batallas que se le atribuyen, es probable que reinase veintidós
años. Murió en batalla contra los filisteos; (combate de Gilboá) batalla
en la que David no participa, pues, siendo perseguido, tuvo que
refugiarse al lado de un líder filisteo (Aquis).


Según las fuentes, David y Saúl se habían convertido en enemigos, por
lo menos desde el punto de vista de Saúl. Las fuentes describen a
Jonatán, hijo de Saúl, o bien a Michal, su hija, (fuente anti-monárquica
y monárquica respectivamente) como quien ayudó a David a escapar de
Saúl, aunque asumiendo la reconciliación antes de su muerte.


David ya había sido "ungido" como rey por Samuel (antes de la muerte
de Saúl), pero un heredero, Ishbaal ben Saúl, asumió el control de
Israel. Este gobernó solamente dos años antes de que lo asesinaran.29


1007 a. C.: David reina en Judá

David se convirtió en rey (pero únicamente de la tribu sureña: Judá).
Gobernaría desde la ciudad de Hebrón durante siete años, para recién
después ser designado rey de toda la nación (Israel y Judá).


Cierto número de críticos y eruditos bíblicos han sugerido que David consiguió esa ansiada unificación de las 12 tribus con base en su carisma, pero lo que realmente parece legitimarlo es su férrea determinación de hacer cumplir la Ley de Yahvé (Jehová). [Los líderes de las tribus le dijeron: “hueso y carne tuya somos” (2ª Sam 5:1-3)].


El líder judío sería –con su valentía y piedad- el unificador de las
tribus israelitas. Consiguió también hacer de Jerusalén la capital de la
nación y algo largamente añorado por los fieles: recuperar y traer el
Arca de la Alianza (cuyo culto había perdido intensidad en tiempo de los
Jueces ) (Jos 7:6; 2ª Sam 6:2) De acuerdo a las Escrituras, en la
segunda mitad de su reinado aparecen desvíos, algunos crímenes y ciertas
conjuras que culminan con Absalom,
hijo de David, propuesto como nuevo rey. La Biblia entonces describe
como un gran sector del pueblo se rebela y asume el control de Judea,
forzando a David al exilio al este del Jordán.30


Según Samuel, David lanzó un contraataque y triunfó, aunque con la
pérdida de Absalom, su hijo. Reconquistada Judea, y afirmado el control
sobre Israel, David regresa al oeste del Jordán, aunque continúa
sufriendo rebeliones por parte de Israel, superando con éxito cada una.


1000 a. C.: David reina en Jerusalén


Sistro de los tiempos davídicos.31

"Y David y toda la casa de Israel tocaban [...] sistros y címbalos de dedo (Tanaj, 2 Samuel 6:5).32
Según las escrituras, David emprendió campañas militares contra los
enemigos de Judá e Israel, y derrotó a enemigos tales como los
filisteos, amonitas y arameos, consiguiendo así que las fronteras permanecieran seguras, aunque sufrió la sublevación de su hijo Absalom,
erigido como rey en Hebrón, que fue derrotado y muerto por las tropas
de David. Tras arrebatar Jerusalén a los jebuseos, trasladó a esta
ciudad fortificada la corte, que estaba en Hebrón, y el Arca de la Alianza, que se encontraba en Quiryat Yearim.nota 1


Bajo su gobierno, Israel pasó de reino a imperio, y su esfera de
influencia militar y política en el Oriente Medio se amplió, controlando
a estados más débiles como a los filisteos, Moab, Edom, Ammon, y
convirtiendo en vasallas a algunas ciudades-estados arameas (Aram-Zobah y
Aram-Damasco). Las fronteras iban del mar Mediterráneo al desierto
árabe, del mar Rojo al río Éufrates.33
Algunos arqueólogos modernos, aunque minoritarios, creen que el área
bajo control de Judá e Israel en esta época, excluyendo los territorios
fenicios en la costa mediterránea, no excedía de 34.000 km²; de éstos,
el reino de Israel abarcaba cerca de 24.000 km².nota 2 34


Sin embargo, La interpretación de la evidencia arqueológica sobre el
alcance y la naturaleza de Judá y Jerusalén en el siglo 10 antes de
Cristo es un tema de intenso debate. Israel Finkelstein y Zeev Herzog de Universidad de Tel Aviv
piensa que el registro arqueológico no apoya la opinión de que Israel
en ese momento era un estado importante, sino más bien un pequeño reino
tribal.35 Finkelstein dice en La Biblia desenterrada(2001):
"[O] n la base de estudios arqueológicos, Judá se mantuvo relativamente
vacía de población permanente, muy aislados y la derecha muy marginal
hasta después de la hora prevista para el David y Salomón, sin grandes
centros urbanos y sin jerarquía pronunciada de caseríos, aldeas y
ciudades.36 De acuerdo con Zeev Herzog
"la monarquía unida de David y Salomón, que es descrito por la Biblia
como un poder regional, era a lo sumo un pequeño reino tribal ".37 En el otro William Dever, en su ¿Qué hicieron los escritores bíblicos y que sabían?,
sostiene que la evidencia arqueológica y antropológica apoya el relato
bíblico amplia de un Estado de Judea en el siglo 10 antes de Cristo.38
Encuestas de la superficie se encuentra destinada a la localización y
cambios en los patrones de asentamiento de población han demostrado que
entre los siglos 16 y 8 a. C., período que incluye los reinos bíblicos
de David y Salomón, toda la población de la región montañosa de Judá, no
era más que unos 5.000 personas, la mayoría de ellos pastores errantes,
con la zona urbanizada toda consta de una veintena de pequeños pueblos.39


965 a. C.: reinado de Salomón


El Templo de Salomón, Jerusalén, siglo X a.E.C.40
A la muerte de David le sucedió su hijo Salomón, que obtuvo el reino sobre su hermano mayor, Adonías, a quién tuvo que eliminar más adelante. El reinado de Salomón trajo una paz sin precedentes.


Tanto David como Salomón firmaron alianzas con el rey Hiram I
de Tiro, y a cambio de la entrega de tierras llegaron en gran número
artesanos, trabajadores expertos, dinero, joyas, madera de cedro y otras
mercancías. El palacio de David y el templo de Salomón se suponen
construidos con la ayuda de recursos tirios y gracias a sus arquitectos,
como Hiram.


Salomón reconstruyó gran número de ciudades importantes, como Megido,
Hazor, y Gazer (ésta ha sido excavada por arqueólogos, y se han
descubierto grandes construcciones, como los establos para los caballos
de Salomón, junto con fuentes para abrevaderos).


Emprendió numerosas obras arquitectónicas, entre las que destaca por encima de todas la construcción del Templo de Jerusalén
como asiento para el arca de la Alianza; también levantó un palacio y
realizó obras públicas como un terraplén que unía el templo con la
ciudad de Jerusalén.nota 3


Reinó durante 40 años, durante los cuales pudieron ‘formar un pueblo’, tener prosperidad, y vivir ‘siguiendo los preceptos del Señor’ (1ª Re 3:20, 8:25). Salomón había obtenido Sabiduría –la cual estaba basada en Seguir los mandamientos de Dios-
(Sal 119:98,104 –ver 1ª Re 2:2; Job 28:28-). Durante ese período, la
seguridad interna y el control de las vías de comunicación facilitaron
la expansión del comercio, lo cual incrementaba la prosperidad aunque se
acercaba peligrosamente al modo de vida de los cananeos (que la Ley de
Yahvé repudiaba) . Mantuvo relaciones con Ofir y Saba.41


Llegó a ser el rey más rico de todos (1ª Re 9:26; 10:4). Pero en la
última etapa de su reinado, la corrupción iba en aumento; la corte y la
burocracia se expandían (1ª Re 4; 11:3). En la conclusión de las
transacciones con el rey Hiram I
de Tiro demostró no ser justo, sino que trató de sacar ventajas (1ª Re
9:12-14). En medio de una vida suntuosa permitió el ascenso de muchos
sacerdotes que eran indignos (2ª Re 23:13, 5).


División en dos reinos


Monarquía dividida: Reino de Judá (sur) y Reino de Israel (norte). El mapa presenta los dos reinos hebreos, 928 a.E.C.42

Monarquía dividida: Reino de Judá (sur) y Reino de Israel (norte). El mapa presenta los dos reinos hebreos hacia 830 a.E.C..

Antiguo sello israelita. León de Judá y sello israelita con león rugiente e inscripción en hebreo; empleado durante el reinado de Jeroboam, el sello tiene por destinatario a un alto oficial llamado "Shemá".43

Relieves del segundo registro del Obelisco negro, en el que aparece un emisario del rey israelita Jehú u Oseas, o acaso uno de ellos, postrándose ante el monarca asirio Salmanasar III. El texto cuneiforme asirio expresa: "El tributo de Oseas, hijo de [la Casa de] Omri", 44 cosa que no implica que la figura postrada sea necesariamente un rey.45
Con la muerte de Salomón en 928 a. C.,46 dejando como heredero a su hijo Roboam,
las tensiones entre las diez tribus israelitas del norte y aquellas de
Judá y Benjamín en el sur alcanzaron un punto de crisis. Cuando Roboam
desoyó las quejas económicas, el territorio de Israel fue dividido en
dos entidades hebreas: el Reino de Israel en el norte y el Reino de Judá
en el sur. El primero incluyó en su territorio a Siquem y Samaria; el
segundo conservó Jerusalén. La mayoría de las demás provincias vasallas
no-hebreas se perdieron.


El Reino de Israel se mantuvo independiente desde el año 928 a. C. hasta 722 a. C., cuando fue conquistado por el imperio asirio. El Reino de Judá tuvo una vida más larga que su rival, existiendo hasta 586 a. C., cuando fue conquistado por el imperio babilónico.47 48


Respecto a la monarquía dividida, la Biblia de los setenta, los masoretas y Flavio Josefo
mencionan diferentes figuras. Se desconoce si los dos reinos utilizaron
el mismo calendario, además de si los años de los reinados son
completos o en parte, y se ignora si hubo corregencias. Isaías
expresó que los reinos de "Israel y Judá persiguen solamente el lucro"
(Is 9:18-21). Aquellas prácticas corruptas que se encontraban en los
pueblos vecinos (ambición, envidia, opresión de los más débiles…) fueron
introducidas en Israel contrariando la Ley de Yahvé. La antigua
advertencia (vivir aparte… no imitar las costumbres de las demás
naciones) (Deuteronomio 12:29,30) se había echado al olvido. Se dejó de
lado aquel sentido de ‘pueblo religioso’(Dt 12:5,14) y las tribus se
dividieron debido a un problema de índole económico (los tributos) (1ª
Re 12:15, 18)


Reino de Israel, 928-720 a.E.C.

En 928 a.E.C., Jeroboam lideró la rebelión de las tribus norteñas estableciendo el reino de Israel (I Reyes), con capital en Siquem.49
B. S. J. Isserlin asegura que el reino de Israel era similar a los
cananeos de su entorno geográfico, tanto en su política y economía como
en los planteamientos urbanos, artísticos e industriales.50


Económicamente el estado de Israel parece haberse desarrollado mejor
que su vecino del sur, debido a las mayores precipitaciones y unos
sistemas agrícolas más productivos pero sobre todo, debido a su posición
estratégica para aprovechar el comercio regional. La Biblia indica que
Yahvé estaba «indignado» con las tribus norteñas por el modo de vida
ostentoso, desigual y corrupto que practicaban. A su vez, la tribu de
Judá se mantenía apenas «un poco menos infiel… reconoce todavía a Dios»
(Oseas 4:15; 11:12; Amós 2:4-8).


Según el relato bíblico, que no se puede comprobar por fuentes
exteriores, hubo 19 reyes en Israel. Políticamente fue menos estable que
Judá, manteniendo una dirección carismática por méritos, y la
competencia entre las familias predominantes parece depender mucho más
de acuerdos (de trasfondo comercial) con poderes exteriores, como Tiro, Aram o Asiria
que en su propia autoridad. Esta necesidad de aplacar a vecinos
importantes comenzó ya en el reinado de Jeroboam, cuando, a pesar de las
fortalezas de Tirzah, Siquem, y Penuel, Israel fue invadido por el faraón Sheshonq I de la dinastía XXII.51


El reino de Israel parece haber sido más poderoso en la segunda mitad del siglo IX a. C., cuando Omrí (885-874 a. C.) fundó una nueva dinastía con capital en Samaria, ciudad mejor protegida, con la ayuda de la ciudad fenicia de Tiro, reforzando esta alianza al casar a su hijo y sucesor, Acab (874-853 a. C.), con la hija del gobernante de Tiro Etbaal(llamada Jezabel), y a su hija Atalía con el hijo del rey Josafat
de Judá, el futuro rey Joram. Acab formalizó múltiples alianzas entre
los pequeños reinos y contribuyó con 2.000 carros y 10.000 soldados a la
coalición que derrotó a Salmanasar III en Qarqar (853 a. C.).


El texto bíblico narra que estaban imitando "el materialismo de
Asiria y naciones vecinas" (2ª Reyes 17:13-16). Y Dios transmitía: "¡ay
de ellos cuando yo llegue a abandonarlos!" (Oseas 9:12; ver Dt 28:36).
Fueron advertidos: "Sobre sus riquezas crecerá la hortiga" (Oseas 9:6;
Miqueas 2:3); "Haré que seáis deportados…" y "el asirio será su rey…"
(Is 7:17-8:4; Amós 5:27; 6:14; Os 11:5).


Doce años más tarde, Jehú, con ayuda del reino de Aram, dio un golpe en el cual Acab y su familia fueron asesinados, y es ungido rey de Israel por el profeta Eliseo.
La Biblia no hace ninguna referencia al hecho, pero las fuentes asirias
se refieren a Jehu como un monarca de la casa de Omri, lo que puede
indicar que este golpe era el resultado de luchas dentro de la misma
familia predominante. Hacia el 838 a. C. se aviene a pagar un tributo a Salmanasar III
para defenderse de los arameos de Damasco. Jehú se muestra arrodillado
ante el monarca asirio en el obelisco negro de Salmanasar, y es el único
monarca de cualquiera de ambos estados del que se conserva un retrato.


Como resultado de estos cambios, Israel, al igual que su vecino
meridional Judá, cayó dentro de la influencia del reino arameo de Damasco. El rey Hazael guio a los arameos contra Joram de Israel y Ocozías de Judá,
derrotándolos en Ramoth-Gilead. Tras esta batalla, Hazael rechazó dos
ataques asirios contra los territorios israelitas situados al este del
Jordán, y la ciudad filistea de Gath e intentó tomar Jerusalén (II Reyes, 2 12-17). Una inscripción descubierta en Tel Dan se considera erigida por Hazael, después de la batalla de Ramoth-Gilead.52


Jeroboam II
fue coronado rey de Israel en 787 a. C. Luchó contra Damasco y Moab en
un intento de expansión, mientras los asirios amenazaban a los reinos
judíos. Jeroboam II murió en el año 747 a. C. en una rebelión popular, y
con él acabó la dinastía de Jehú.


De la sangrienta rebelión, Menahem se erigió en rey el 745 a. C., y aceptó pagar tributo a Tiglath-Pileser III. Le sucedió su hijo Pecajías, que perdió el trono ante Pecaj.


Pecaj intentó una coalición con Rasón de Damasco y Ajaz de Judá, para combatir a los asirios. Pero Ajaz apoya a Asiria, lo que llevó a la caída de Israel en poder del rey asirio Sargón II, que lo incorporó a su imperio en el 720 a. C. (II Reyes 17, 3-6) (Se cumplió así la profecía bíblica de Oseas 11:5).


La evidencia arqueológica demuestra que mucha gente huyó al sur,
hacia Judá cuya capital (Jerusalén) parece haber crecido cerca del 500%
en este tiempo. En esta época muchas tradiciones norteñas comenzaron a
seguirse en la región de Judá.


Este período del eclipse de Israel coincidió con la aparición de una línea de profetas independientes, Amós, Joel, Oseas y Elías, Eliseo e Isaías
altamente críticos con los monarcas de Israel. La tradición espiritual
que más adelante crecería en la historia bíblica, tuvo aquí sus
orígenes, según muchos exégetas bíblicos.


Profetas del Reino de Israel

  • Elías, el oponente de las invenciones religiosas bajo Acab y Jezabel, 870-852 a.C.53
  • Eliseo, el sucesor elegido de Elías, 855-798 a.C.53
  • Amós, 780-760 a.C.53
  • Oseas, 760-722 a.C.53

Reino de Judá, 928-587 a.E.C.


Mapa del sur del Levante mediterráneo, ca. 830 a.E.C.

     Reino de Judá      Reino de Israel      Estados fenicios      Reino de Aram-Damasco      Reino de Amón      Imperio asirio      Tribus arameas

     Pentápolis filistea      Reino de Moab      Tribus árabes      Reino de Edom      Tribus nabateas
Cuando en 928 a. C. el reino de Israel fue dividido, las tribus de Judá y Benjamín permanecieron fieles a Roboam,
formando el reino de Judá con capital en Jerusalén. Roboam luchó contra
el rey de las tribus norteñas (Jeroboam de Israel), guerra que mantuvo
su hijo Abías o Abiyam (II Crónicas 12 y 13), acabando con su ejército y tomando Betel.


Le sucedió su hijo Asa, que prohibió el culto a los ídolos, rechazó a los madianitas y a los etíopes que habían invadido Judá, y luchó contra Basa, rey de Israel, con la ayuda de Ben-Hadad, rey de Siria.


La dinastía de Omri extremó la guerra contra Judá, ayudada por su alianza dinástica con Tiro. El rey Ocozías, hijo de Joram, fue asesinado en el año 846 a. C., su madre Atalía se hizo con el poder e inició en Jerusalén una persecución contra los que se oponían al culto del dios Baal. Seis años después, Atalía fue asesinada.


En 838 a. C. Joás,
hijo de Ocozías, fue coronado rey de Judá y en Jerusalén se destruyó el
templo de Baal, expulsándose a sus sacerdotes. Se restauró la religión
de Yahvé, la misma actitud que toma Yehú en Israel destruyendo el templo
de Baal en Samaria. Joás aceptó pagar un tributo a Salmanassar III para
defenderse de los arameos de Damasco, y en el 800 a. C. Damasco fue
vencida por el rey asirio Adadnarari III, conquistando Joás en el año 802 a. C. las zonas que habían dominado los arameos en Galilea.


Durante el reinado de Acaz,
la población de Jerusalén creció enormemente como resultado de la
llegada de muchos refugiados israelitas que huían del norte, pasando de
ser un pequeño mercado local a una ciudad importante. Durante el reinado
de Ezequías (725-697 a. C.), su hijo, la población había crecido alrededor de un 500%.54
Ezequías realizó grandes obras, incluyendo la ampliación de las
murallas para incluir la nueva población tanto en Jerusalén como en Lakís,
construyó la piscina de Siloé para dar a la ciudad una fuente
independiente de agua en el interior de la ciudad y también amplió el Templo.


Phillip Davies y otros sugieren que en este tiempo Jerusalén
estableció su propia escuela de escribas, reuniendo las fuentes de
tradición oral que se conocen como Tradición yavista.55
La Biblia también explica que Ezequías emprendió importantes reformas
religiosas, procurando sin éxito centralizar las prácticas religiosas en
el Templo y erradicar la adoración a la serpiente Nehustan, culto que duraba desde los tiempos de Moisés. Parece haber seguido el camino de Salomón, recopilando la sabiduría (lo cual se basaba en “seguir los mandamientos del Señor” (Dt 4:6; Sal 119:98; Baruc 4:1) atribuida a este monarca.


Quizá incitado por los faraones de la dinastía vigésimo sexta egipcia
formó y dirigió una coalición con los filisteos intentando unificar
Judá e Israel. Los asirios, que dominaban la zona filistea impusieron el
famoso asedio de Laquis
y luego de tomar la segundad ciudad más importente del reino judío la
pasaron a cenizas. Luego procedieron a cercar los alrededores de
Jerusalén. Senaquerib se jactó de haber "encerrado a Ezequías en Jerusalén como a un pájaro en una jaula", pero la Biblia habla del ángel del señor que golpea violentamente a los sitiadores asirios,
relato que parece señalar algún tipo de epidemia. Los asirios debieron
retirarse, pero pudieron imponer un tributo que empobreció a la
población de Judá durante una generación y condujo a la total revocación
de las reformas de Ezequías.


Durante el reinado de su hijo Manasés (697-642 a. C.), bajo la más suave dominación de los reyes Asarhaddón y Asurbanipal,
se produjo una recuperación económica, aunque en desmedro de la
justicia y rectitud. Se sabe que pasó cierto tiempo con Asarhaddón en Babilonia y que acompañó a Asurbanipal en la invasión a Egipto.


El hijo de Manasés, Amón, tuvo un reinado insignificante antes de que fuera asesinado el año 639 y pasara el trono a su hijo Josías, todavía un niño. En 633 a. C. el sacerdote Helcías, padre de Jeremías, encontró un libro de la Torá perdido (II Reyes 22:8) que atribuyó a Moisés, posiblemente el Deuteronomio, lo que condujo a reformas importantes del culto.56
Este reinado vio el eclipse y derrumbamiento del imperio asirio, lo que
llevó a Josías a seguir la trayectoria de Ezequías centralizando toda
el culto en Jerusalén, e instituyendo el Pésaj.
Intentó unificar los reinos judíos y luchó por liberarse de Asiria, y
tras la caída de ésta (612 a. C.), por liberarse de Egipto. Murió en
batalla, resistiendo el avance del faraón Necao II en 609 a. C. En el 608 a. C. Necao II impuso como rey a Eliaquim, con el nombre de Joaquim. Los egipcios fueron derrotados por los babilonios el 605 a. C. en Karkemish, y Egipto quedó sometido por el rey babilonio Nabucodonosor II, que influenciaba también sobre Judá.


El año 598 a. C. Nabucodonosor II eliminó a Joaquim, que se negaba a pagar tributo. Su hijo Joaquín tampoco colaboraba, así que el ejército babilonio encarceló a Joaquín y a toda la aristocracia del reino de Judá.


Nabucodonosor II nombró a Matanías rey de Judá en el año 589 a. C. y, bajo el nombre de Sedecías,
fue el último rey judío. El imperio babilónico arrasó Jerusalén, su
Templo fue destruido en 587 a. C. y la elite judía fue obligada a vivir
en Babilonia.(II Reyes 25:1-9).


Profetas del Reino de Judá

Cautiverio y retorno


Deportaciones de judíos hacia el imperio asirio, siglo VIII a.E.C.

Cautiverio asirio de los israelitas del norte

En el año 853 a. C. Salmanasar III de Asiria y posteriormente Sargón II
en el 722 a. C. conquistaron las diez tribus norteñas de Israel
destruyendo su capital, Samaria, y enviando a la población al exilio y
cautiverio. La mayoría de los habitantes, incluyendo la clase dirigente,
fue deportada a otras tierras ocupadas por el imperio asirio y se trajo
gente de esos lugares a Samaria. Así, dispersados entre otras naciones,
asimilados en nuevas culturas, llegaron a perder su identidad original.
Nunca volvieron, como pueblo, a la tierra de Israel, se les llamó las diez tribus perdidas.


Cautiverio babilónico de los judíos


El exilio babilónico: deportación de los hebreos del Reino de Judá a Babilonia tras la destrucción del Templo de Jerusalén, siglo VI a.E.C. (Tissot, 1896-1902).
  • 605 a. C.: primera diáspora.
    La “parte noble” del pueblo judío (entre ellos el profeta Daniel) se ve
    forzada a vivir en territorio imperial y bajo sus lineamientos.
  • 586 a. C.: Babilonia conquista Judá y su capital, Jerusalén. Gran parte de la población, sobre todo la nobleza, fue deportada a Babilonia. A ello se refiere comúnmente la expresión Cautiverio de Babilonia.
Muchos consiguieron huir a Egipto, Siria, Mesopotamia, o Persia. El
rey de Judá (ciego y sometido) conservaba su título nominal (Jer 52:31) y
los hebreos “valiosos” eran ubicados en cargos importantes de la
administración imperial (Dn 1:19; 2:49). No obstante, los judíos se
sentían "esclavos" ya que quien impartía los dictámenes en relación a la
vida, el ritual y culto era el monarca babilónico (Daniel 3:10; 37).
Los judíos estaban cautivados… (Jer 50:33). Ya no podrían regir sus
vidas pues las fuerzas imperiales los conducirían hacia la idolatría, forma de vida en la que se priorizaba el materialismo (Je 52:30). En Babilonia, los judíos permanecieron casi 50 años.57


Dominio persa


Ciro II el Grande permite el retorno de los hebreos a Tierra Santa. Miniatura francesa de Jean Fouquet c. 1470-75 (ilustración para Flavio Josefo, Antigüedades judías, libro XI).58
Siete decenios después, Dios transmitía al rey de Babilonia: “Tu imperio... será dado a los persas” (Dn 4:24; 5: 20-28).


  • 559 a. C.: Ciro II el Grande se convirtió en rey de Persia, conquistando Babilonia en el 539 a. C. El imperio persa gobernó Asia occidental, incluyendo a Israel, hasta 332 a. C.
Como la mayoría de los grandes emperadores de la Antigüedad, Ciro
permitió a sus súbditos practicar su propia religión en tanto que
incorporasen al monarca y le hiciesen ofrendas. Respecto a los judíos,
Ciro tomó la medida de acabar con su estatus de nación esclava, aunque
la relación seguió siendo una de dependencia. Estas reformas se reflejan
en el cilindro de Ciro y en los libros bíblicos de I Crónicas y de Esdras,
que indican que Ciro sacó a los israelitas de la servidumbre en
Babilonia y, por decreto, en 537 a.E.C., les otorgó la permisión para
volver a la tierra de Israel y reedificar el Templo de Jerusalén, cosa que parte de ellos llevó a cabo.59


Segundo Templo

Reconstrucción del Templo


Reconstrucción del Templo de Jerusalén según la concepción de Zorobabel.60

En Mesopotamia: Purim. Esther y Mordecai escriben las cartas a los judíos,61 siglo V a.E.C.62
Ciro permitió que Sesbasar, príncipe de la tribu de Judá, y Zorobabel
llevaran a los judíos de Babilonia a Jerusalén. Se les permitió volver
con los objetos del Templo que los babilónicos habían tomado, y
comenzaron la construcción del segundo templo (Esdras 1 y ss., (Isaías) 44 y 45), que se concluirá en 525 a. C. bajo la dirección espiritual de los profetas Ageo y Zacarías. En este tiempo Tierra Santa era una satrapía persa conocida como Yehud.


Los papiros de Elefantina (circa 450 - 419 a. C.) de la colonia
militar judía en Egipto demuestran que en este tiempo algunos judíos
seguían siendo politeístas, y consideraban que Yahveh tenía como esposa a la diosa Anat.


En 445 a. C. Artajerjes nombró virrey de Judá a Nehemías, que
fortificó Jerusalén para defenderse del gobernador de Samaria. Los pocos
miles de judíos retornados estaban despojados de las riquezas
materiales. La vida se les tornaba difícil bajo el dominio persa. La
reformada vida israelí fue conducida por los escribas judíos Nehemías (Nehemías 1-6) y Esdras;
este último instituyó la sinagoga y sus servicios de rezos, y coronó la
Toráh leyéndola en público ante la gran asamblea que instaló en
Jerusalén. Comenzaba a renacer el impulso de comunidad religiosa, logrando que Dios volviera a estar en medio de ellos (Ageo 2:5,6,20)


Por su parte los samaritanos construyeron su propio Templo en el monte Garizim en 428 a. C. (II Macabeos 6,2).


La herencia de Alejandro Magno


Tierra Santa en el período persa, 538-332 a.E.C.63

Idem. en época de los macabeos, 168-135 a.E.C.64
Los persas fueron derrotados por Alejandro Magno, en el 331 a. C.,
en cuyo imperio estaba incluido Israel. Se dice que no atacó Jerusalén
después que una delegación de judíos lo convencieran de su lealtad,
mostrándole las profecías contenidas en las escrituras que esto debía
ocurrir.


Daniel 11:3-4 Se levantará luego un rey valiente, el cual
dominará con gran poder y hará su voluntad. Pero cuando se haya
levantado, su reino será quebrantado y repartido hacia los cuatro
vientos del cielo; no a sus descendientes, ni según el dominio con que
él dominó; porque su reino será arrancado y será para otros fuera de
ellos.
Daniel 8:8-9 Y el macho cabrío se engrandeció sobremanera;
pero estando en su mayor fuerza, aquel gran cuerno fue quebrado, y en su
lugar salieron otros cuatro cuernos notables hacia los cuatro vientos
del cielo. Y de uno de ellos salió un cuerno pequeño, que creció mucho
al sur, y al oriente, y hacia la tierra gloriosa.
En el 323 a. C. moría Alejandro, y en la lucha por el poder Israel
cambió de manos por lo menos cinco veces en apenas veinte años. Babilonia y Siria fueron gobernadas por los seléucidas, y Egipto por los ptolomeos. Durante el reinado de Ptolomeo II (281-246 a. C.) se tradujo la Septuaginta en Alejandría. En esta época comenzaron a tomar importancia algunas sectas, como los fariseos, saduceos y esenios.


El rey seléucida Antíoco IV Epífanes
atacó y venció a los ptolomeos y conquistó su imperio, saqueando
Jerusalén para usar los fondos del Templo. Entre 174-163 a. C. promulgó
varias ordenanzas para conseguir la helenización de los judíos: trató de
suprimir el culto a Yahveh, prohibió el judaísmo suspendiendo toda
clase de manifestación religiosa y trató de establecer el culto a los dioses griegos. Las imposición de ideas griegas hacía sentir ‘esclavizados’ a los judíos (1ª Mac 8:18).


“...los sacerdotes ya no mostraban celo por el servicio del altar;
sino que ...descuidando los sacrificios, ...eran invitados a lanzar el
disco”
(2ª Macabeos 4:14,15). Pero el sacerdote judío Matatías y sus dos hijos (los Macabeos) consiguieron levantar a los "judíos piadosos" (jasidim) en su contra y lo expulsaron. La fiesta judía de Jánuca conmemora este hecho (I Macabeos).


Reino asmoneo

Judas Macabeo recuperó Jerusalén en 164 a. C., purificando el Templo, reanudando los sacrificios; en 150 a. C. se expulsó a los sirios de Jerusalén, formándose Judá como Estado judío independiente. Comenzaba el reinado de los Asmoneos, apoyado por los fariseos (168-142 a. C.). cuando el imperio seléucida cayó en 129 a. C., el estado judío adquirió plena autonomía.


Juan Hircano,
hijo de Simón Macabeo y Sumo sacerdote, gobernó desde Jerusalén entre
134 y 104 a. C., pero no fue reconocido como rey al no ser descendiente
de David. Se anexionó Jordania, Samaria, Galilea e Idumea, con el apoyo de Roma. Los idumeos fueron forzados a convertirse al judaísmo.


En 105 a. C. el nuevo rey y sumo sacerdote de Judá, Alejandro Janneo, cambió el apoyo de los fariseos por el de los saduceos.


Ocupación romana


Reino de Herodes el Grande, 40 a.E.C.-4 E.C.

Segundo Templo de Jerusalén, con de las mejoras llevadas a cabo por Herodes, siglo I E.C.65

Antiguo shéquel de plata de Israel, con cáliz de kidush y tres granadas simbólicas de Judea, Samaria y Galilea, forjado en el segundo año de la Primera Guerra Judía contra Roma, 66-73 E.C.

Sitio y destrucción de Jerusalén por los romanos bajo las órdenes de Tito, 70 E.C.66
En el año 63 a. C. Pompeyo conquistó la región, convirtiéndola en reino tributario de Roma, y entre 57 y 55 a. C. Aulo Gabinio, procónsul de Siria, repartió el reino asmoneo en Galilea, Samaria y Judea, con 5 distritos bajo la jurisdicción del Sanedrín.
Reprimió una revuelta popular y restituyó a Juan Hircano II como sumo
sacerdote. Durante su campaña en Egipto, Alejandro, hijo de Aristóbulo
II, arrebató a Hircano II el título de sumo sacerdote, pero en el año
54 a. C. Gabinio restableció el orden.


En 40 a. C. Herodes el Grande fue designado rey de los judíos por el Senado romano, lo que no indicaba independencia pero sí una cierta autonomía, y una total exención de impuestos. Durante su reinado nacieron Jesús de Nazareth y Juan Bautista. Le sucedió Herodes Antipas, nombrado tetrarca de Galilea y Perea el año 4 a.E.C.


En el año 6, Arquelao, etnarca de Samaria, Judea e Idumea fue depuesto por Augusto, y el territorio se anexionó a Siria como Provincia de Judea, con capital en Cesárea, bajo gobierno directo de Roma. Quirino, legado de Siria, organizó el primer censo de Judea al que se oponían los zelotes dirigidos por Judas el Galileo.67


Siguió un breve periodo de paz en Judá y Galilea durante los años 7-26, durante los cuales murió (el año 9) Hillel, presidente del Sanedrín y opuesto a la rigidez religiosa de Shammai, y el año 18 el prefecto Valerio Grato nombró Sumo Sacerdote a Caifás, que sería depuesto en el 36 por el legado sirio Vitelio.


El año 26 Poncio Pilatos fue nombrado gobernador de Judea. Durante su mandato (26 - 36) fue decapitado Juan Bautista y crucificado Jesús. También fue depuesto por Vitelo.


Tras la muerte de Herodes Antipas el año 39, Claudio designa como rey de los judíos a Herodes Agripa I (41-44), a Herodes de Calcis y posteriormente a Herodes Agripa II, (48-100), séptimo y último rey de la familia Herodes.


Guerras judeo-romanas

Primera Guerra Judeo-Romana

Comenzó en el año 66, cuando Eleazar ben Ananías, cesó los rezos y los sacrificios en el Templo en honor al emperador romano
y mandó atacar a la guarnición de Jerusalén, todo ello debido al robo
del tesoro del Templo. Herodes Agripa II huyó y los judíos consiguieron
hacer frente al legado de Siria hasta la llegada del general Vespasiano en el año 67, que logró conquistar el norte. En el 69 fue nombrado emperador, dejando a su hijo Tito el encargo de tomar Jerusalén.


Destrucción de Jerusalén

Tito logró tomar la ciudad y arrasar con la población en el año 70,
destruyendo el segundo Templo, del cual solo se mantuvo parcialmente en
pie la pared occidental, conocida actualmente como el "muro de los lamentos". La última fortaleza rebelde, Masada, cayó el año 73. A continuación, los romanos sustituyeron la figura del procurador por un pretor, y estacionaron de forma permanente la X Legión.


El rabino Yochanan ben Zakai, huido de Jerusalén, obtuvo el permiso
del general romano para establecer un centro de aprendizaje judío y
formar el Sanedrín en la ciudad de Yavne, lo que se considera el comienzo del judaísmo rabínico, cuando se recopiló la Halajá.68 El Sanedrín se convirtió en el cuerpo religioso, político y judicial supremo para los judíos por todo el mundo hasta el 425, cuando fue disuelto por el emperador Marciano.


Segunda Guerra Judeo-Romana

Llamada Guerra de Kitos, comenzó en el 113 debida a las medidas de Trajano contra los judíos: prohibición del estudio de la Torá y la observancia del Shabat, medidas tomadas para asegurarse la retaguardia mientras luchaba contra el Imperio Parto. La revuelta se produjo en varios lugares debido a la diáspora: en Cirene, desde donde se extendió a Alejandría, en Chipre, y en Mesopotamia, siendo duramente reprimida por los romanos. En el 118 fue nombrado emperador Adriano, que prometió autorizar la reconstrucción del Templo, lo que trajo la paz a la región.


Tercera Guerra Judeo-Romana

En 132 estalló la rebelión de Bar Kojba, debida a varias razones, pero sobre todo a los decretos dictados por Adriano que prohibían el Brit Milá, la celebración del Shabat, y las leyes de pureza en la familia, así como por las noticias de que pretendía levantar un templo en honor de Júpiter sobre las ruinas del de Jerusalén.


Akiva ben Iosef, que presidía el Sanedrín, convenció al resto de sus miembros de nombrar nasí (príncipe) a Simón bar Kojba,
que declaró la independencia frente al Imperio romano, manteniendo a
Israel durante tres años como estado independiente y llegando a emitir
su propia moneda. Los romanos enviaron nueve legiones para reconquistar Israel, adoptando una estrategia de tierra quemada: según Dión Casio,
murieron 580.000 personas y se arrasaron 50 pueblos fortificados y 985
aldeas. Bar Kojba se refugió en la fortaleza de Betar, donde fue
capturado y muerto por los romanos en el 135.


Jerusalén también fue arrasada, y para evitar el retorno de los judíos se construyó una ciudad romana, Aelia Capitolina,
y se aposentó una guarnición en el lugar donde se había levantado el
Templo. Para completar la humillación, se llamó desde entonces a la
región Provincia de Palestina, eligiendo el nombre de los filisteos a
quienes Roma identificó como enemigos de los judíos. La mayoría de la
población judía fue asesinada, esclavizada o exiliada y la religión
judía prohibida, con lo que el centro de la vida religiosa judía pasó a
Babilonia. En el siglo IV, Constantino I el Grande permitió a los judíos regresar a Jerusalén a lamentar su derrota una vez al año, el 9 de Av, en el Muro de las Lamentaciones.


Véase también

Fuentes

Notas


  • En
    2008 se encontraron pruebas de la existencia de un reino fuerte en
    Khirbet Qeiyafa. Ha sido datado con el carbono-14 por la universidad de
    Oxford entre de 1050 y 970 a. C., la época en que se sitúa el reinado de
    David. Seymour Gitin, arqueólogo y director del instituto de Albright
    de Jerusalén (institución americana privada) que ha estudiado los
    hallazgos de Khirbet Qeiyafa, asegura que los hallazgos de 2008 prueban
    que "había un centro urbano en el siglo X en las colinas al norte del
    Valle de Elah".

    1. Las
      pruebas históricas sobre el rey Salomón, independientes del relato
      bíblico, son escasas. Las excavaciones arqueológicas en Hazor, Megiddo,
      Bethshan y Gézer
      han descubierto estructuras que los arqueólogos israelíes Ammon
      Ben-Tor, Amihai Mazar y el norteamericano William G. Dever sostienen que
      pertenecen a su reino y que todas esas ciudades fueron destruidas por
      un ataque de Sheshonq I. Finkelstein sostiene que estas estructuras son de un siglo después del reinado de Salomón.

    Citas


    Bibliografía

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    • Herrmann, Siegfried (1985). Historia de Israel en la época del antiguo testamento. Ediciones Sígueme. ISBN 84-301-0770-3.
    • Kitchen, K. A. (1997). «"A Possible Mention of David in the Late Tenth Century B.C."». Journal for the Study of the Old Testament (76). pág. 29–44.
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    • Renan, Ernest (1986). Historia del pueblo de Israel. Orbis. ISBN 84-7634-316-7.
    • Vaux, Roland de (1975). Historia antigua de Israel. Ediciones Cristiandad. ISBN 84-7057-169-9.

    Enlaces externos

    Menú de navegación


  • Una inscripción encontrada en Tell Dan fechada en 850-835 a. C. se interpreta que habla de la casa de David
    (ביתדוד); la estela de Mesha de Moab, parece contener la misma frase; y
    Kenneth Kitchen ha traducido una inscripción del faraón Sheshonq I de c. 945 a. C. que menciona "las tierras de David"


  • Whitelam, Keith (1997). La invención del antiguo Israel: el silencio de la historia de Palestina. (en inglés). Routledge.


  • Davies, Philip (1998). Escribas y Escuelas: la canonización de las Escrituras hebreas. (en inglés). Knox Press.


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  • Finkelstein, Israel y Silberman, Neil Asher (2001). The Bible Unearthed: Archaeology's New Vision of Ancient Israel and the Origin of its Sacred Texts. ISBN 0-684-86912-8.


  • Mayani, Zacharie. Los hicsos y el mundo bíblico.


  • Solamente desde el siglo IX hay fuentes asirias contemporáneas que permitan comprobar los datos bíblicos.


  • Se menciona a los habiru en las cartas de Amarna, que incluyen muchas de gobernantes cananeos vasallos, escritas en acadio (la lengua diplomática de la época) a los faraones egipcios en el siglo XIV a. C.


  • (Se ha encontrado el llamado prisma de Tikunani, un artefacto de arcilla con una inscripción cuneiforme en acadio, que enumera los nombres de los soldados Habiru del rey Tunip-Teššup de Tikunani (un reino pequeño del norte mesopotámico). Este rey era contemporáneo del hitita Hattusili I
    (circa 1550 a. C.). Desgraciadamente resultó que la mayoría de los 438
    soldados Habiru de Tunip-Tessup tenía nombres hurritas que no se podrían
    explicar en ninguna lengua cananea (la familia a la cual pertenece el
    hebreo) o ninguna otra lengua semítica. El resto de los nombres es
    semítico, excepto uno. Esto también planteó la duda sobre si Habiru no
    fuese un grupo étnico.


  • Finkelstein, Israel y Silberman, Neil Asher (2001). The Bible Unearthed: Archaeology's New Vision of Ancient Israel and the Origin of its Sacred Texts. ISBN ISBN 0-684-86912-8.


  • Mieroop, Marc van (2003). Historia del Oriente Próximo, 3.000-323 a. C. ISBN 0-631-22552-8.


  • Redford, Donald (1992). Egipto, Canaan e Israel en los tiempos antiguos. Princeton University Press.


  • Abdelnour, Farras. «Ugarit» (en inglés). Consultado el 2007.


  • Plesheth (pel-eh'-sheth) - Palabra #6429 del Strong’s Hebrew Bible Dictionary -


  • Éxodo 12:37: "Partieron los hijos de Israel de Ramesés hacia Sucot. Eran unos seiscientos mil hombres de a pie, sin contar los niños."


  • Simón Dubnow, Manual de la Historia Judía, Buenos Aires: Sigal, 1977, pp. 34 y 673; Gabrielle Sed-Rajna, Abecedaire du Judaïsme, París: Flammarion, 2000, p. 116; Philip Wilkinson, Religiões (Religions, 2008), Río de Janeiro: Zahar, 2011, p. 62.


  • H.W.F. Saggs, "Le monde juif avant l'Exil", en: Le monde du Judaïsme
    (The Jewish World, 1979), ed. Elie Kedourie, Londres y París: Thames
    & Hudson, 2003, p. 42. Análoga es la posición de Kenneth A. Kitchen (Rehabilitación del Antiguo Testamento, Michigan: William B. Eerdmans, 2003). El texto bíblico narra además que "los hijos de Israel [...] edificaron para el faraón las ciudades de almacenaje, Pitón y Ramesés" (Éxodo 1:6, 11).


  • Ibid pág. 257-259


  • Conquest of Canaán in Biblical Archeology (www.truthnet.org)


  • Dever, William G. (2001). What Did the Biblical Writers Know and When Did They Know It?. ISBN 0-8028-4794-3.


  • Dever, William G. (2003). Who Were the Early Israelites and Where Did They Come from?. ISBN 0-8028-0975-8.


  • Mazar, Amihai (1990). Arqueología de las tierras bíblicas, 10.000 - 586 adC. ISBN 0-385-42590-2.


  • Kitchen, Kenneth A. (2003). On the Reliability of the Old Testament. William B. Eerdmans Publishing Company. ISBN 0-8028-4960-1.


  • Estudio llevado a cabo dentro del Programa Científico Israelí y dedicado a la historia del pueblo judío (The Jewish People, Jerusalén: Keter, 1973, sección 7); conclusiones reafirmadas por Sarah Kochab (Israel, Barcelona: Folio, 2005, p. 26).


  • Finkelstein, Israel; Silberman, Neil (2001). The Bible Unearthed. Ed. Free Press. ISBN 0-7432-2338-1.


  • 2 Samuel 2:10


  • Esta
    sección del texto bíblico, y el resto de los libros de Samuel parece
    pertenecer a una sola fuente, que retrata a Israel y Judea como reinos
    absolutamente distintos.


  • Conocido en hebreo como מנענעים—'sacudidor';
    antiguo instrumento musical de percusión de aspecto similar a un
    sonajero pero con el cuerpo de metal, en forma de pala o de herradura y
    atravesado por una serie de varillas metálicas curvadas en su extremo;
    se tocaba agitándolo con una mano, con lo que las varillas, deslizándose
    lateralmente, chocaban con el cuerpo metálico y producían así el
    sonido.


  • וְדָוִ֣ד וְכָל־ בֵּ֣ית יִשְׂרָאֵ֗ל מְשַֽׂחֲקִים֙ ... וּבִמְנַֽעַנְעִ֖ים וּֽבְצֶלְצֶלִֽים. Estampilla israelí diseñada por Miriam Karoly en 1955-56.


  • 2 Samuel


  • McKenzie, Steven (2002). King David: A Biography. Oxford University Press. ISBN 978-0-19-513273-1.


  • David y de Salomón: En busca de la Sagrada Biblia, los reyes y las raíces de la tradición occidental pp20


  • Israel Finkelstein y Neil Asher Silberman,La Biblia desenterrada: Nueva visión arqueológica del antiguo Israel y el origen de su Sagrada Textos, p.132. Mas este resumen del libro de Finkelstein y Silberman.


  • = 32 & Itemid = 34 mideastfacts.org - La deconstrucción de las murallas de Jericó <! - Bot título generado -->


  • google.com
    / books? id = 6-VxwC5rQtwC & pg = PA127 & lpg = PA127 & dq =
    dever + arqueólogo & source = web & ots = hTb69Ntpq9 & sig =
    6boKenG3GOaky3YTJDx5LKr851k # PPP1, M1 Dever, ¿Què sabian los
    escritores bíblicos...?


  • El
    patrón de asentamiento en el antiguo Judá, véase A. Ofer "," Toda la
    región montañosa de Judá ": de la franja de la liquidación a una
    monarquía próspera ", en I. Finkelstein y N. Na aman", eds.Del nomadismo a la monarquía(Jerusalén:
    Israel Exploration Society, 1994), pp. 92-121; "las colinas de Judea en
    el período bíblico", Qadmoniot 115 (1998), 40-52 (en hebreo), "el
    período monárquico en el Altiplano de Judea," en A. Mazar, ed.Estudios en el Arqueología de la Edad de Hierro en Israel y Jordania(Sheffield: Sheffield Academic Press, 2001), pp. 14-37.


  • Grabado de la Hagadá de Pésaj publicada en Ámsterdam en 1695 (Jewish Encyclopedia: Temple).


  • I Reyes 9, 28


  • Mapa
    desarrollado por la American Bible Society en 1888, considerando el
    estado de ambos reinos en 928 a.E.C., año en que murió el rey Salomón.
    La Franja de Gaza aparece en el mapa como parte del Reino de Judá
    y ello se debe a que los autores del mismo consideraban que los
    filisteos eran un pueblo que poseía ciudades-estado, en vez de una
    unidad territorial. El mapa en cuestión tiene por fin solo ilustrar de
    modo general y aproximativo las áreas de incidencia de cada uno de los
    reinos hebreos.


  • Estampilla
    israelí diseñada por Miriam Karoly en 1957. Simón Dubnow ha
    identificado el motivo del león rugiente en el antiguo sello israelita
    con el "Escudo de Jeroboam" (Historia del pueblo judío, Buenos Aires: Sigal, 1977, p. 110). Iconográficamente, el león del antiguo sello israelita tiene por referente último al León de Judá. Existen por lo menos otros dos antiguos sellos israelitas que fueron empleados con similares propósitos:

    Debido a que el Reino de Israel tuvo dos monarcas
    llamados "Jeroboam", la opinión de académicos e historiadores respecto a
    cuál Jeroboam se refiere la inscripción del antiguo sello israelita no
    es del todo unánime; John Boardman y Zvi Yavetz lo ligan espacíficamente a Jeroboam II (The Cambridge Ancient History, Cambridge University Press, 1982, vol. III, parte 1, p. 501; "Les juifs et les grandes puissances de l'Antiquité", en: Le monde du judaïsme,
    Londres y París: Thames & Hudson, 2003, p. 90); Lawrence J.
    Mykytiuk, por otra parte, supone que el nombre "Jeroboam" en la
    inscripción del antiguo sello puede referirse a Jeroboam I (Identifying Biblical persons in Northwest Semitic inscriptions of 1200-539 B.C.E., Society of Biblical Literature, 2004, p. 136).





  • Alan Millard, Discoveries from Bible Times, Oxford: Lion, 1997, p. 121


  • El nombre en cuestión lejos está de haber sido único o extraordinario entre los judíos de la Antigüedad.


  • En
    un estudio llevado a cabo dentro del Programa Científico Israelí y
    dedicado a la historia del pueblo judío se afirma que el Reino de Judá
    emergió luego de la muerte de Salomón (The Jewish People, Jerusalén: Keter, 1973, sección 7); reafirmado por Sarah Kochab, Israel, Barcelona: Folio, 2005, p. 26.


  • I Reyes


  • II Crónicas


  • Estudio llevado a cabo dentro del Programa Científico Israelí y dedicado a la historia del pueblo judío (The Jewish People, Jerusalén: Keter, 1973, sección 7); también Sarah Kochab, Israel, Barcelona: Folio, 2005, p. 26.


  • Isserlin, B. S. J. The Israelites. Augsburg Fortress Publishers. ISBN 0-8006-3426-8.


  • Nuevas evidencias arqueológicas


  • Excavaciones recientes en Gath han revelado la evidencia del sitio y conquista de la ciudad.


  • The Old Testament, Londres: Hermes, 2002, p. 239: "The Old Testament Prophets".


  • Finkelsetein,
    Israel, and Silberman, Niel Asher (2002), "The Bible Unearthed:
    Archaeology's New Vision of Ancient Israel and the Origin of Its Sacred
    Texts" (Free Press)


  • Davies, Phillip R. (1998), "Scribes and Schools: The Canonization of the Hebrew Scriptures" (Westminister John Knox Press)


  • Martin
    Noth demostró que el Deuteronomio difiere de los otros cuatro libros
    del Pentateuco, y que fue compuesto en gran parte durante el reinado de
    Josías convirtiendo al rey en un héroe conectado de cerca con el
    sacerdocio de Siloé


  • De hecho 49 años, ya que se vieron obligados a permanecer allí entre 586 y 537 a.E.C.


  • París, Bibliothèque nationale de France, Jean Fouquet, peintre et enlumineur du XVe siècle, 2003.


  • Parte considerable del pueblo judío dejó Babilonia, mas otra parte permaneció en ella desde entonces.


  • Perspectiva decimonónica.


  • Óleo por Aert de Gelder,
    1675; cuadro preservado y exhibido en el Museo Nacional de Bellas
    Artes, Buenos Aires; donación de Mario Hirsch, 1983 (Jorge Glusberg, Obras maestras del Museo Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires: MNBA, 1996, p. 38). El Libro de Ester
    es la fuente de inspiración literaria de esta pintura: "Escribió
    Mardoqueo [...] y envió cartas a todos los judíos que estaban en todas
    las provincias del rey Asuero, cercanos y distantes, ordenándoles que
    celebraran el día decimocuarto del mes de Adar, y el decimoquinto del
    mismo mes, de cada año, como días en que los judíos estuvieron en paz
    con sus enemigos, y como el mes en que la tristeza se trocó en alegría, y
    el luto en festividad; que los convirtieran en días de banquete y de
    gozo, en día de enviar regalos cada uno a su vecino, y dádivas a los
    pobres" (Ester 9:20-22). La obra de Aert de Gelder es alternativamente conocida como "Ester y Mardoqueo escribiendo la primera carta del Purim" (MNBA Obra 8643).
    La información provista por el MNBA indica que Aert de Gelder trató en
    diversas ocasiones la historia de Ester, siendo ella popular en Holanda
    durante el siglo XVII, dado que el pueblo holandés parangonaba en ese
    entonces su propia lucha contra el yugo español con aquella que los
    judíos de la Antigüedad libraban contra sus enemigos. El Libro de Ester
    narra cómo una joven judía intercedió ante el rey persa Asuero (Jerjes)
    a fin de evitar la masacre de su pueblo, decreatada por Aman, quien era
    enemigo de los judíos. La masacre estaba prevista para un día "tirado a
    suertes". Mas la intervención de Ester contribuyó al triunfo de los
    judíos y a partir de ello se estableció la fiesta de Purim, nombre que deriva del persa p[u]r [Libro de Ester: "fue hechada Pur, esto es, la suerte"; Ester 3:7]
    y que significa "echar suertes". El tema era considerado ejemplificador
    y a su vez celebratorio del triunfo holandés respecto a su enemigo de
    entonces, España (Á.M. Navarro y A. Lo Russo; Texto obra MNBA 8643,
    consultado y adaptado 5 de agosto de 2014). Sin dar referencia ninguna,
    el sitio del MNBA determina que "Purim" es un "nombre que se deriva del
    sánscrito par o del persa por" (Obra MNBA 8643, consultado 5 de agosto de 2014); pero ello no es del todo exacto: Purim es antetodo un término del idioma hebreo, cuyo singular es Pur (פור), y que en dicha lengua, tanto la histórica como la moderna, es identificado con ha-goral, vocablo que es entendido en este caso como "la suerte" (פורים);
    el término es empleado en hebreo probablemente desde el siglo V a.E.C.;
    siendo muy posible que el término hebreo provenga a su vez del persa Pur (Agencia Judía: Purim); Ernest Klein sugiere que el término Purim proviene del acadio puru y este a su vez del sumerio bur (A Comprehensive Etymological Dictionary of the English Language, Ámsterdam: Elsevier Scientific Publishing Co., 1971; Douglas Harper, "Purim", Online Etymology Dictionary, 2001-2014). Tanto el Webster's Revised Unabridged Dictionary como el Chambers's Twentieth Century Dictionary indican que la etimología de Purim es hebrea (Fine Dictionary: Purim).
    Con todo, ninguna de las fuentes consultadas sugiere un posible origen
    sánscrito para el término en cuestión. Consulta realizada 5 de agosto de
    2014.


  • Siendo identificados a partir de la cronología de los reyes de Persia, y a través de Jerjes I en particular, Ester y Mardoqueo pertenecen al siglo V a.E.C.; "Ahasuerus", Jewish Encyclopedia, Nueva York, 1906; Robert J. Littman, "The Religious Policy of Xerxes and the Book of Esther", The Jewish Quarterly Review, 65/3, enero de 1975, pp. 145-148; Simón Dubnow, Historia Judía, Buenos Aires: Sigal, 1977, capítulo XIV; "Ahasuerus", Chabad, accedido 11 de agosto de 2014; atípicamente, han sido propuestos los siglos III-II a.E.C. (Shaul Shaked, "Book of Esther", Encyclopaedia Iranica, 1998-2012, VIII:6, pp. 655-657; consultado 11 de agosto de 2014).


  • George Adam Smith, Atlas of the Historical Geography of the Holy Land, 1915).


  • Smith, Atlas, 1915.


  • Modelo desarrollado por Michael Avi-Yonah y preservado en el Museo de Israel, Jerusalén (Second Temple Model, accedido 12 de junio de 2014).


  • Óleo del pintor escocés David Roberts, realizado en 1850.


  • Josefo en Antigüedades judías, libro XVIII.


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