IGLESIA DE SANTA MARÍA (TOBED)
Paralelo al Perejiles discurre otro afluente del Jalón, el río Grío , en
cuyo valle se localiza una de las joyas del mudéjar aragonés, la
iglesia de Santa María en Tobed . Este templo fue construido por
iniciativa de la Orden del Santo Sepulcro que, como hemos visto, también
tuvo su propio templo en Calatayud . Aquí en Tobed hubo una importante
encomienda que jugó un activo papel en diversos enfrentamientos bélicos,
especialmente durante la guerra de los Dos Pedros, cuando se comenzó a
levantar el templo. Estos dos hechos, la pertenencia a una orden militar
y el contexto bélico en que se comenzó su construcción, explican su
tipología de iglesia-fortaleza en la que se mezclan diversos elementos
estructurales y decorativos para dar respuesta a sus diferentes
funciones: religiosa y defensiva. Esta tipología será ampliamente
difundida por la zona fronteriza con Castilla durante la segunda mitad
del siglo XIV y la primera del XV. De este modo, su fábrica se sitúa en
la segunda mitad del siglo XIV y, como otras de su misma tipología,
consta de nave única con capillas laterales entre los contrafuertes y
cabecera recta y triple, toda el la recorrida en su parte superior por
una tribuna . La nave se divide en tres tramos cubiertos con bóvedas de
crucería y separados por otros tramos más pequeños cubiertos con cañón
que aparecen flanqueados por torres-contrafuerte , que definen el perfil
militar de la obra y de las que la del ángulo suroccidental cumple la
función de campanario. A primera vista destaca, además de por ese aire
militar, por su espectacular hastial occidental, recuperado tras una
restauración en 1985. Se trata de toda una fachada decorada con paños de
entrelazo, arcos mixtilíneos, esquinillas, etc ., realizados en
ladrillo resaltado y enmarcados por bandas de cerámica en espiga , al
igual que la portada en triple arco apuntado de resabios goticistas, y
con algunos restos incluso de pintura mural.
cuyo valle se localiza una de las joyas del mudéjar aragonés, la
iglesia de Santa María en Tobed . Este templo fue construido por
iniciativa de la Orden del Santo Sepulcro que, como hemos visto, también
tuvo su propio templo en Calatayud . Aquí en Tobed hubo una importante
encomienda que jugó un activo papel en diversos enfrentamientos bélicos,
especialmente durante la guerra de los Dos Pedros, cuando se comenzó a
levantar el templo. Estos dos hechos, la pertenencia a una orden militar
y el contexto bélico en que se comenzó su construcción, explican su
tipología de iglesia-fortaleza en la que se mezclan diversos elementos
estructurales y decorativos para dar respuesta a sus diferentes
funciones: religiosa y defensiva. Esta tipología será ampliamente
difundida por la zona fronteriza con Castilla durante la segunda mitad
del siglo XIV y la primera del XV. De este modo, su fábrica se sitúa en
la segunda mitad del siglo XIV y, como otras de su misma tipología,
consta de nave única con capillas laterales entre los contrafuertes y
cabecera recta y triple, toda el la recorrida en su parte superior por
una tribuna . La nave se divide en tres tramos cubiertos con bóvedas de
crucería y separados por otros tramos más pequeños cubiertos con cañón
que aparecen flanqueados por torres-contrafuerte , que definen el perfil
militar de la obra y de las que la del ángulo suroccidental cumple la
función de campanario. A primera vista destaca, además de por ese aire
militar, por su espectacular hastial occidental, recuperado tras una
restauración en 1985. Se trata de toda una fachada decorada con paños de
entrelazo, arcos mixtilíneos, esquinillas, etc ., realizados en
ladrillo resaltado y enmarcados por bandas de cerámica en espiga , al
igual que la portada en triple arco apuntado de resabios goticistas, y
con algunos restos incluso de pintura mural.
Esta profusión decorativa del exterior continúa en el interior, donde se
conservan agramilados policromados en blanco, negro y rojo en los muros
y bóvedas, celosías talladas de yeso en el cierre de los vanos y un
bello alfarje de madera en el sotocoro con las armas del Papa Luna,
durante cuyo pontificado se terminó la obra . Todo el lo, arquitectura y
decoración forman un conjunto muy unitario poco habitual en los
monumentos mudéjares aragoneses, ya que en muchas ocasiones las reformas
posteriores han desvirtuado en gran medida el espíritu del espacio
interior primitivo.
conservan agramilados policromados en blanco, negro y rojo en los muros
y bóvedas, celosías talladas de yeso en el cierre de los vanos y un
bello alfarje de madera en el sotocoro con las armas del Papa Luna,
durante cuyo pontificado se terminó la obra . Todo el lo, arquitectura y
decoración forman un conjunto muy unitario poco habitual en los
monumentos mudéjares aragoneses, ya que en muchas ocasiones las reformas
posteriores han desvirtuado en gran medida el espíritu del espacio
interior primitivo.
La techumbre o alfarje, de madera, está también ricamente decorada. La
capilla de la Virgen es de gran interés artístico. Se decora con
azulejos de Muel del siglo XVI de colores azul, verde y amarillo.
capilla de la Virgen es de gran interés artístico. Se decora con
azulejos de Muel del siglo XVI de colores azul, verde y amarillo.
El altar mayor es de madera y estilo barroco. En la parte central de
este retablo se encuentra un icono de la Virgen obsequiado a la Iglesia
en 1400 por el Rey aragonés Martín I el Humano, que a su vez le fue
regalado por el Rey Luis VI de Francia. Este icono representa a la
Virgen con el niño en brazos pintada en lienzo sobre tabla. El icono se
guarda en una hornacina de plata plateresca, labrada en Calatayud, del
siglo XVI. La capilla se cierra con una verja del siglo XVI, muy similar
a la que luce la Iglesia de San Pablo en Zaragoza.
este retablo se encuentra un icono de la Virgen obsequiado a la Iglesia
en 1400 por el Rey aragonés Martín I el Humano, que a su vez le fue
regalado por el Rey Luis VI de Francia. Este icono representa a la
Virgen con el niño en brazos pintada en lienzo sobre tabla. El icono se
guarda en una hornacina de plata plateresca, labrada en Calatayud, del
siglo XVI. La capilla se cierra con una verja del siglo XVI, muy similar
a la que luce la Iglesia de San Pablo en Zaragoza.
En el exterior se puede admirar el muro magníficamente decorado con un
paño de ladrillo resaltado con tracerías y decoración cerámica vidriada
bicolor. La iglesia se apoya en cuatro torres-contrafuertes. En la
fachada principal se observa la falta de una segunda torre que se inició
pero no llegó a terminarse. Estas torres son, junto a la tribuna o
andador, abierta al exterior en arquerías apuntadas, los elementos que
otorgan el carácter militar de iglesia fortaleza.
paño de ladrillo resaltado con tracerías y decoración cerámica vidriada
bicolor. La iglesia se apoya en cuatro torres-contrafuertes. En la
fachada principal se observa la falta de una segunda torre que se inició
pero no llegó a terminarse. Estas torres son, junto a la tribuna o
andador, abierta al exterior en arquerías apuntadas, los elementos que
otorgan el carácter militar de iglesia fortaleza.
En esta iglesia se están llevando a cabo en la actualidad obras de
restauración, al mismo tiempo que se planea acondicionar una parte del
pequeño claustro que tuvo adosado para exponer sus mejores obras de arte
mueble, como el famoso Icono de la Virgen, una tabla policromada de
inspiración bizantina que regaló el rey Martín 1 el Humano en 1400.
restauración, al mismo tiempo que se planea acondicionar una parte del
pequeño claustro que tuvo adosado para exponer sus mejores obras de arte
mueble, como el famoso Icono de la Virgen, una tabla policromada de
inspiración bizantina que regaló el rey Martín 1 el Humano en 1400.
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